Este díptico de dos gatos parlanchines, está compuesto por dos cuadros de 80 cm x 80 cm cada uno. En este caso, el espectador es el protagonista de la obra y de la conversación de este par de felinos que se burlan de la superstición humana relacionada con los gatos negros. ¿Cómo un gato negro puede ser de mala suerte y no los mismos humanos que han hecho tantos desastres en el mundo?
(Escuché dos gatos negros conversando:
Gato 1: “Un humano nos está mirando”
Gato 2: “No lo mires, es de mala suerte”)