Esta pintura hace parte de la serie Blanco, amarillo y rosa, donde se presenta un contraste entre el color de la forma (Manos) y el color del fondo de cada pintura. Las manos se presentan en varios ángulos y exposiciones lumínicas diferentes con el objetivo de visibilizar la variabilidad de colores y tonalidades que llega a presentar el color de la piel natural, a diferencia del fondo que son colores completamente planos y homogéneos.
Estos fondos fueron pintados específicamente con pintura acrílica que se encuentra en el mercado con nombres como: piel de porcelana, piel de angel, piel angelical, piel durazno, piel suave, piel morena. Dichos colores al ser genéricos y referenciar al color natural de la piel caen en el factor discriminatorio de aceptar el color de la piel como un color únicamente claro.